
BKR: más que protección, actitud sobre ruedas.
El casco Cyclops fue concebido como una pieza gráfica que busca romper con lo convencional y destacar en cualquier entorno. El diseño parte de una premisa clara: generar un impacto inmediato a través de una estética agresiva, vibrante y cargada de energía visual. Su nombre, inspirado en la mitología del cíclope, encuentra en el ojo central un elemento dominante que se convierte en el eje narrativo de la ilustración. Desde ahí, todo el diseño se despliega con una fuerza que transmite poder, intensidad y carácter.
La propuesta visual se apoya en una paleta de colores saturados y contrastantes: tonos neón, verdes eléctricos, amarillos brillantes y acentos púrpuras que, al interactuar con el fondo oscuro, generan un efecto dinámico y casi hipnótico. Este choque de colores no solo aporta modernidad, sino que también refuerza la idea de un estilo urbano que toma referencias del arte callejero, la estética pop y la gráfica contemporánea.
Los trazos están pensados para acentuar la agresividad de las formas: colmillos afilados, miradas intensas y detalles orgánicos que evocan a una criatura fantástica, mitad monstruo y mitad símbolo urbano. El visor espejado en tono rosado completa la composición, aportando un contraste inesperado que equilibra la rudeza del diseño con un detalle futurista y llamativo.
Más allá de su función como accesorio de protección, el Cyclops se convierte en una declaración visual. Cada ángulo revela nuevos detalles que refuerzan su carácter narrativo, haciendo del casco un objeto que no solo se usa, sino que se muestra como parte de la identidad del portador. Es un casco diseñado para quienes entienden la carretera como escenario y la conducción como expresión de estilo, actitud y personalidad. Con Cyclops, la seguridad se combina con un lenguaje gráfico audaz que marca diferencia y no pasa inadvertido.